Standard & Poor’s (S&P) ha advertido que la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE) tendría un impacto negativo tanto para el país como para su sector financiero.
La agencia de calificación considera que un voto a favor de abandonar la UE, en el referéndum que se celebrará a finales de 2017, podría suponer un riesgo para las perspectivas de crecimiento de la economía del Reino Unido.
Frank Gill, analista de Crédito de S&P, ha señalado que “creemos que esto podría hacer mella de forma significativa en el superávit comercial neto de más del 3% que registra actualmente en el sector de los servicios financieros y de seguros”.
Sin embargo, Gill explica que el alcance de este impacto va a depender de los acuerdos de libre comercio alternativos que logre establecer el Gobierno británico con sus socios europeos, en caso de que abandone la UE.
S&P ha recordado que los servicios financieros atraen el 30% de la inversión directa extranjera en Reino Unido, lo que equivale al 17% del PIB, y casi la mitad de esta inversión procede de la UE.
En este sentido, las entidades bancarias globales podrían considerar un posible traslado de la base de sus operaciones europeas.
Por otra parte, el informe de S&P señala que si bien para los bancos británicos orientados al negocio doméstico el impacto sería probablemente “indirecto y potencialmente modesto”, podrían sufrir consecuencias en la economía británica, en la solvencia y en la actividad de sus actores.
Gill ha comentado que “dado que Reino Unido tiene el segundo déficit por cuenta corriente más grande del mundo, poner en riesgo unos de los pocos sectores exportadores netos mediante un referéndum con una alta carga política supondría en nuestra opinión un riesgo sustancial para la balanza de pagos, la divisa y la economía”.