El Parlamento de Cataluña debatirá, tal como se anticipaba, el paquete de nuevos impuestos que el Gobierno de la comunidad autónoma había incluido en la ley de acompañamiento de los Presupuestos de 2017.
La CUP y JxSí bloquearon las enmiendas a la totalidad que presentaron el resto de partidos de la oposición y el documento, que aumenta la carga fiscal en Cataluña, será tramitado.
La supresión de la desgravación por compra de vivienda, de un 1,5%, es uno de los que afectan a más catalanes. En caso de que la ley salga adelante, tal como se plantea, todos aquellos que tengan una renta por encima de los 30.000 euros perderán el derecho. La medida, de acuerdo con la Generalitat, podría afectar a unos 250.000 contribuyentes.
El Mercado Alternativo Bursátil (MAB) también se verá afectado. Las empresas catalanas se habían mostrado activas a la hora de debutar en este mercado, que es una vía alternativa para obtener financiación, y quienes invertían contaban con una serie de ventajas, que ahora serán eliminadas. C’s criticó esta iniciativa, que era eficiente para impulsar el acceso a este mercado de medianas y pequeñas empresas.
Además, con el apoyo de la CUP, la Cámara catalana también debatirá la tasa sobre las bebidas azucaradas y la que sustituye al impuesto sobre nucleares. Estos dos nuevos gravámenes, según las estimaciones del propio Oriol Junqueras, presidente de Esquerra Republicana de Catalunya y vicepresidente de la Generalidad de Cataluña, incrementarán conjuntamente en más de 100 millones de euros la recaudación. También prosigue la tramitación de la reforma de la tasas sobre el gran comercio.
Estas medidas fiscales permitirán aumentar la recaudación en más de 180 millones (incluyendo el nuevo tributo sobre activos improductivos) a partir de 2018. Este próximo año, los ingresos se incrementarían en 121 millones de euros.