El mercado laboral de Reino Unido ha impulsado la economía en los meses previos al Brexit, gracias a la mayor mejora salarial que se ha registrado en más de 10 años y al impulso del empleo, mucho más de lo esperado, en el periodo septiembre-noviembre.
La Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS por sus siglas en inglés) ha informado que los salarios semanales medios aumentaron un 3,4 por ciento en 2018, el mayor incremento que se ha registrado desde mediados del año 2008, superando el pronóstico promedio del 3,3 por ciento de un sondeo de Reuters realizado entre economistas.
Los datos corregidos de los efectos inflacionarios muestran que el salario total se ha elevado al ritmo más rápido en dos años, sin embargo, los británicos siguen ganando menos en términos reales que antes de la crisis financiera.
La ONS ha indicado que la cantidad de personas con trabajo ha aumentado en los tres meses hasta noviembre en la mayor cuantía en siete meses, aunque no queda claro si las empresas habrán seguido contratando a este ritmo debido a la incertidumbre que se ha creado en torno al Brexit.
Tej Parikh, economista principal del Institute of Directors, ha señalado que “el robusto mercado laboral del Reino Unido continúa brindando una pujanza muy necesaria para la economía en un período de tensión”.
En este momento, en el que el desempleo se ubica cerca de su nivel más bajo desde la década de 1970, en el 4,0 por ciento entre los meses de septiembre y noviembre, los empresarios han comenzado a aumentar los salarios del personal de forma rápida.
El número de personas empleadas ha aumentado en 141.000 en los tres meses hasta noviembre, situándose por encima de todos los pronósticos de un sondeo publicado por la agencia Reuters que estimaba a un aumento de 85.000, incrementando la tasa de ocupación de los británicos en edad de trabajar a un récord del 75,8 por ciento.