El Ministerio de Economía y Competitividad ha informado que el déficit comercial de España alcanzó los 20.530,3 millones de euros en los diez primeros meses del año, cifra un 2,7% inferior a la del mismo periodo de 2014.
El organismo gubernamental detalló que en concreto, las exportaciones españolas de mercancías crecieron 3,8% en los diez primeros meses de 2015 (1,7 puntos superior a la del mismo periodo del año 2014, 2,1%), hasta los 208.430,4 millones de euros, máximo histórico en la serie.
Por su parte, las importaciones subieron un 3,2%, hasta los 228.960,7 millones de euros. La tasa de cobertura se situó en el 91,0%, es decir, 0,5 puntos superior a la de enero-octubre de 2014 (90,5%).
El Ministerio de Economía y Competitividad agregó que el saldo no energético arrojó un superávit de 2.163,3 millones de euros (11.960,7 millones de euros en enero-octubre de 2014), mientras que el saldo energético registró una mejora del 31,3% (reducción del déficit energético), como resultado de la caída de los precios de la energía.
Desde Economía destacaron que “los resultados acumulados para España están en línea con los obtenidos por sus principales socios de la zona euro”, donde las exportaciones aumentaron un 4,2% interanual, y las de la UE-28 algo más, el 4,8%.
El Ministerio explicó que en los primeros diez meses de 2015 “evolucionaron positivamente” las exportaciones de prácticamente todos los sectores productivos. En concreto, los bienes de equipo (19,9% del total de las exportaciones españolas) crecieron un 3% interanual. Destaca en particular el sector del automóvil (16,9% del total), con un alza del 19.
Los sectores de alimentación, bebidas y tabaco (15,9% del total) y de productos químicos (14,6% del total) vieron incrementarse también sus ventas al exterior un 8,7% y un 6,2%, respectivamente.
Por el contrario, las ventas de productos energéticos retrocedieron un 28% interanual penalizados por los bajos precios internacionales de la energía.
En cuanto a las importaciones, Economía subrayó que «la consolidación de la recuperación» de la economía española se refleja en el crecimiento del 18,4% de las importaciones de bienes de equipo (19,9% del total), como “consecuencia del dinamismo de la inversión productiva”.