La sociedad poseedora de la concesión del aeropuerto de Murcia, en la que la constructora participa con un 60,65%, se ha declarado en preconcurso de acreedores con un pasivo de 200 millones de euros tras rescindir el Gobierno regional el contrato de explotación, según ha informado Sacyr.
La sociedad que tenía adjudicado el aeródromo murciano tiene una deuda financiera de unos 200 millones de euro y ha realizado inversiones por unos 250 millones de euros.
Según Sacyr, el valor neto de la inversión de la constructora en la concesionaria es de 25 millones de euros.
El preconcurso de acreedores es una figura legal que concede hasta cuatro meses a la sociedad afectada para renegociar la deuda con sus acreedores, periodo tras el que deberá presentar concurso si no se produce este acuerdo.
La empresa maneja otras opciones, entre las que se encuentran acciones legales como impugnar la reciente decisión del Gobierno murciano, solicitar la devolución de los fondos invertidos, así como una indemnización por daños y perjuicios.