Según la primera estimación de los datos sobre comercio internacional publicados por la oficina estadística europea, Eurostat, el saldo positivo de la balanza comercial de la zona euro se situó el pasado mes de septiembre en los 26.400 millones de euros, lo que representa un aumento de un 8,6% respecto al mismo mes del año precedente.
En concreto, las importaciones de bienes de la eurozona crecieron un 5,1%, hasta 160.700 millones de euros, mientras que las exportaciones se incrementaron del mismo modo un 5,6%, para alcanzar 187.100 millones de euros. La actividad comercial entre los socios del euro aumentó un 4,9% interanual en septiembre, hasta 157.600 millones de euros.
En relación a los seis primeros meses del año, el comercio de la zona euro registró un superávit de 170.400 millones de euros, esto supone un retroceso cercano al 13% respecto al saldo positivo del primer semestre de 2016, debido a un mayor avance de las importaciones frente al mismo periodo del año precedente.
Así, de enero a septiembre, las importaciones crecieron un 10,4% hasta situarse en 1,45 billones de euros, mientras que las exportaciones lo hicieron un 7,4% para alcanzar 1,62 billones de euros. Asimismo, la actividad comercial entre los estados pertenecientes a la moneda única se incrementó un 7,4%, hasta 1,36 billones de euros.
Por otro lado, la balanza comercial del bloque comunitario de los Veintiocho obtuvo un saldo positivo en septiembre, con un superávit de hasta 3.100 millones de euros, frente al déficit de 1.600 millones de euros que se anotó en el mismo periodo de 2016.
En este sentido, las exportaciones de la Unión Europea aumentaron un 6,3% hasta 156.800 millones de euros, mientras que las importaciones subieron un 3,2%, para situarse en 153.700 millones de euros. Del mismo modo, la actividad comercial entre los estados miembros se incrementó un 4,9% comparado con un año antes, hasta 287.800 millones de euros.