Puerto Rico ha preparado un plan de ajuste fiscal que será la base para renegociar la deuda de cerca de 73.000 millones de dólares que arrastra la isla. El secretario de la Gobernación, Víctor Suárez, explicó que plantean implementarlo en 5 años y tres fases.
La elaboración del plan está terminada en un 80%, y se espera que para el 30 de agosto pueda ser presentado al completo. En una conferencia de prensa Suárez señaló que el plan incluirá además la estrategia de desarrollo económico de los próximos años para Puerto Rico.
Las primeras medidas se aplicarán en dos años de manera rápida. Se trata de acciones en las que hay consenso generalizado y que podrían ejecutarse con mayor facilidad, explicó Suárez. En la segunda fase que propone el grupo de trabajo creado para el tema se tratará de medir el resultado de las medidas que se implementen y realizar los ajustes necesarios, durante un periodo calculado de también 2 años.
La tercera y última fase será de continuidad a las medidas ya en marcha para el ajuste fiscal y el desarrollo económico deseado para Puerto Rico.
Suárez dijo que el plan incluye iniciativas que deberán ser ratificadas por las cámaras legislativas durante el próximo mes de octubre y de «agenda federal», aunque no dio detalles de este último punto.
En cuanto a la negociación con los acreedores, Suárez señaló que ha habido conversaciones informales por parte de asesores del Ejecutivo, y que personal del Banco Gubernamental de Fomento (BGF) también se ha reunido con tenedores de deuda de las corporaciones del Gobierno de Puerto Rico.