La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) mantiene que el PIB crecerá este año un 6,6% y que el empleo equivalente a tiempo completo aumentará un 4,6%, pero empeora una décima su previsión de déficit público, hasta el 7,9%.
El incremento de su previsión de déficit es resultado de la interacción de diferentes factores que lo han elevado, como la adopción de nuevas medidas o la ejecución observada, compensados en gran parte por otros que han actuado en la dirección contraria, como la positiva evolución de la recaudación en los primeros meses del año.
La presidenta de la AIReF, Cristina Herrero, ha afirmado que en septiembre, con información más completa, se revisará el conjunto del cuadro macroeconómico con vistas a determinar el grado de realismo de las previsiones macroeconómicas del Gobierno contenidas en el borrador de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022.
Igualmente, ha explicado que la inexistencia o la suspensión de las reglas fiscales no supone la falta de supervisión fiscal. Además, ha reiterado su recomendación de elaborar una estrategia fiscal a medio plazo que sea «creíble y realista» y que integre las implicaciones macroeconómicas y fiscales de la implementación de las inversiones previstas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
De hecho, su presidenta ha resaltado que es necesario establecer una estrategia fiscal a medio plazo «lo suficientemente flexible y amplia» que cubra todo el periodo de Plan de Recuperación.
Así se desprende del Informe sobre la Ejecución Presupuestaria, Deuda Pública y regla de gasto 2020, donde se recuerda que la AIReF tiene mandato de informar, antes del 15 de julio, sobre el cumplimiento de los objetivos de estabilidad, deuda y regla de gasto del ejercicio en curso.