El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha anunciado una nueva extensión otorgada a la Línea de Crédito Flexible (LCF) de Colombia.
Esta es la cuarta prórroga otorgada en cinco años para el cupo al que Colombia recurre de manera cautelar, y no con el deseo de hacer uso de los 5.450 millones de dólares (4.793 millones de euros) a los que podría tener acceso en caso de necesidad.
La LCF fue creada en el año 2009, durante la crisis financiera que afectó a varios países a nivel mundial, como respuesta a los riesgos que se vieron en ese momento, y Colombia, junto a México y Polonia, fueron los primeros países que solicitaron dicha línea de crédito.
El FMI ha señalado que gracias a esta nueva prórroga, el país sudamericano tendrá disponibles por dos años más esto recursos que ya fueron aprobados.
En las ocasiones anteriores que Colombia ha obtenido esta ayuda, no ha tenido necesidad de hacer uso del cupo. La LCF únicamente puede ser usada por países que, a juicio del FMI, cuenten con políticas macroeconómicas sólidas, con el objetivo de evitar cualquier posible crisis.
David Lipton, primer subdirector gerente del FMI, ha comentado que a pesar de que Colombia cuenta actualmente con buenas condiciones macroeconómicas, “los riesgos externos adversos están generando fuertes vientos desfavorables y, de llegar a materializarse, podrían afectar la posición externa del país”.
Asimismo, ha explicado que a pesar de que la renovación de la línea tiene carácter preventivo, es “un seguro temporal que refuerza la confianza de los mercados”. Colombia obtuvo la aprobación de esta LFC en mayo del año 2009, y se ha renovado en mayo de 2010, en 2011, y en junio de 2013.