La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS por sus siglas en inglés) ha señalado que la tasa del desempleo en Reino Unido se situó en el 4,1% entre mayo y julio de este año, frente al 3,9% de los tres meses anteriores.
De acuerdo con las cifras divulgadas por la ONS, el número de asalariados con empleo fijo bajó en 695.000 personas entre marzo y agosto debido a las medidas de confinamiento impuestas en marzo por el Gobierno para contener la extensión de la COVID-19. El incremento de la tasa de desempleo era ampliamente esperada por los expertos de la City.
El director de estadísticas económicas de la ONS, Darren Morgan, señaló que «los efectos de la pandemia en el mercado laboral empezaron con suavizarse en julio mientras reabrieron algunos sectores de la economía» del país.
El directivo agregó que el empleo empezó a recuperarse en agosto, si bien muchas empresas recortaron puestos de trabajo debido al impacto económico de la pandemia de coronavirus.
Los trabajadores de entre 16 y 24 años fueron los más afectados por la falta de empleo, según la ONS, que situó en 156.000 los jóvenes sin trabajo en el trimestre entre mayo y julio.
Para hacer frente a la crisis, el Gobierno dispuso un plan de ayudas por el que cubre el 80% de los salarios mensuales de las compañías obligadas a cerrar por el virus, pero está previsto que este sistema llegue a su fin el mes próximo.
Estas ayudas han supuesto un coste para el Estado de 27.400 millones de libras (29.592 millones de euros).
Esta misma semana, el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, fustigó la «extraordinaria amenaza» blandida por la Unión Europea si fracasan las negociaciones comerciales postBrexit para defender su intención de modificar el acuerdo de Brexit que provoca una rebelión en sus propias filas.
«Amenazan con imponer fronteras aduaneras a través de nuestro propio país» entre el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte «y dividir nuestras propias tierras», lanzó Johnson ante la Cámara de los Comunes al abrir los debates de su controvertido «proyecto de ley de mercado interno», destaco AFP.
Aprovechando una armonización postbrexit del comercio entre las cuatro naciones del Reino Unido, este texto modifica la aplicación de tarifas y controles aduaneros en Irlanda del Norte previstos por el acuerdo de divorcio con la UE.
Ese tratado internacional, vigente desde el 31 de enero cuando el Reino Unido salió de la UE, prevé un dispositivo por el cual esa provincia británica mantendrá las reglas del mercado común europeo para evitar reimponer una frontera con la vecina República de Irlanda.