El Banco Europeo de Inversiones (BEI) prestó 8.100 millones en créditos a España durante 2012, lo que supone el 15% del total de los créditos de la entidad, convirtiéndose así el país en su principal cliente por noveno año consecutivo.
Durante la presentación de los resultados de la actividad del ejercicio pasado, la vicepresidenta del BEI y exministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha precisado que la participación de España en el organismo es del 10%, «con lo que la financiación que se le prestó en 2012 está por encima de su contribución al banco».
En concreto, la entidad concedió créditos de un total de 52.254 millones en 2012, «una cantidad muy por encima que la que prestaron otros organismos financieros internacionales más conocidos, como el Banco Mundial, que en 2011 concedió 43.000 millones de dólares (32.912 millones de euros), mientras que el BEI prestó 61.000 millones ese año».
Entre 2008 y 2012, la actividad del BEI en España ha crecido un 28%, superando los 45.000 millones. En las pymes, el organismo ha multiplicado por tres su actividad crediticia si se compara con el periodo anterior a la crisis, ha avanzado Álvarez, quien ha cifrado la cuantía que las pequeñas y medianas empresas recibieron el pasado año en más de 3.000 millones «entre los préstamos directos del BEI, que fueron de 2.680 millones, y los más de 400 millones del Fondo Europeo de Inversiones (FEI) en garantías y aportaciones de capital».
No obstante, la exministra ha aclarado que, en total, la financiación para las pymes superó los 6.000 millones, «pues los créditos a estas compañías son siempre intermediados a través de entidades financieras ya establecidas, con las que el BEI acordó que, para poder llevar a cabo estas operaciones, debían dar una cuantía igual que la que da el banco».
Tras las pymes, se situó el desarrollo de las redes de transporte y energía transeuropeas, cuyos proyectos recibieron 1.800 millones en 2012. Para operaciones de protección ambiental y comunidades sostenibles, el BEI concedió 1.200 millones, mientras que 1.100 millones fueron para apoyar la investigación, el desarrollo, la innovación y la economía del conocimiento.
Además, los proyectos «que apoyan el objetivo de la eficiencia, diversificación y seguridad en el sector energético» se repartieron un total de 905 millones. Por último, creó el banco en España un fondo de desarrollo urbano de 120 millones.
Magdalena Álvarez ha adelantado que la actividad del Banco en España se incrementará un 25% durante este año, hasta los 10.000 millones de euros. En total, el BEI prevé que su actividad en todo el mundo ascienda hasta los 60.000 millones en 2013.
Según ha explicado la vicepresidenta del organismo, el banco ha hecho un esfuerzo adicional en tiempos de crisis financiera y restricción de liquidez y se ha convertido en un «catalizador de inversiones y un impulso para la actividad económica».
«Nuestra actividad es anticíclica, porque es justo en épocas de crisis cuando incrementamos la actividad para compensar lo que sucede en el mercado», ha insistido la exministra de Fomento, quien, además, ha subrayado que la tasa de morosidad del BEI «es prácticamente inexistente».
Alvarez ha señalado asimismo que la entidad proporciona crédito tanto al sector público como al privado, indistintamente, y ha indicado que “ahora está empezando a cambiar la tendencia y cada vez el banco otorga más créditos al sector privado tras comenzar su actividad centrado casi exclusivamente en el público».