La Comisión Europea ha captado 12.000 millones de euros en su primera emisión de bonos verdes.
El bono verde ha sido colocado a quince años, con vencimiento el 4 de febrero de 2037. Tiene un cupón del 0,4% y un rendimiento del 0,452% en el mercado secundario. Esto supone una prima de -8 puntos básicos con respecto al mid-swap, es decir, 31,6 puntos básicos por encima del bono alemán a quince años y -4,6 puntos básicos comparado con el título equivalente francés.
El Ejecutivo europeo ha destacado que la demanda de esta primera emisión ha superado los 135.000 millones de euros y «marca la mayor demanda para un bono verde jamás obtenida en los mercados globales de capitales y el mayor bono verde jamás emitido».
Johannes Hahn, el comisario de Presupuestos, ha explicado que se trata de un «fuerte comienzo» para las emisiones de bonos verdes de Bruselas, que se ha fijado como objetivo captar unos 250.000 millones a través de este tipo de títulos sostenibles hasta 2026.
La UE quiere convertirse en el mayor emisor de bonos verdes del mundo y prevé tener un «fuerte impacto positivo» en el mercado.
Bank of America, Crédit Agricole, Deutsche Bank, Nomura y TD Securities han sido las entidades financieras que han liderado la operación. Además, han contado con el apoyo de Danske Bank, Intesa Sanpaolo y Banco Santander.
Desde Bruselas han indicado que la emisión de bonos verdes sigue los principios fijados por la Asociación Internacional de Mercados de Capitales (ICMA, por sus siglas en inglés) y servirá para contrastar que los Estados miembros cumplen con su obligación de dedicar al menos el 37% de las transferencias y préstamos a inversiones relacionadas con la transición ecológica.
Los gastos que realicen los socios comunitarios serán asignados con un coeficiente (0%, 40% o 100%) de acuerdo a su contribución al clima y el marco establece nueve categorías de inversión, entre las que se encuentran el transporte limpio, la eficiencia energética o las energías limpias.