China ha lanzado oficialmente un nuevo mercado, Star Market, en el que cotizarán sus empresas tecnológicas, al estilo del Nasdaq estadounidense. Esta iniciativa se produce en plenas disputas tecnológicas entre los dos gigantes económicos.
EEUU y China tendrán un nuevo frente de rivalidad, y como viene siendo habitual en los últimos tiempos, vuelve a enmarcarse en el sector tecnológico.
El gigante asiático ha lanzado, de manera oficial, SSE Star Market, el nuevo mercado de la Bolsa de Shanghai en el que cotizarán las empresas tecnológicas. La nueva iniciativa sigue el modelo aplicado en EEUU con el Nasdaq, el mercado estrella de los últimos años.
El lanzamiento oficial no ha incluido detalles básicos como la fecha en la que comenzará a cotizar el nuevo mercado, o el número de integrantes con el que contará. En las últimas fechas, sin embargo, las autoridades regulatorias han aprobado las salidas a Bolsa de compañías tecnológicas como Shenzhen ChipScreen Biosciences, Anji Microelectronics y Suzhou Tztek Technology.
La iniciativa busca captar además la atención de gigantes tecnológicos asiáticos que optaron en su día por cotizar en otros mercados. En las últimas semanas Alibaba, el gigante chino del comercio electrónico que debutó en la Bolsa de Nueva York en 2014, confirmó su estreno como cotizada en Hong Kong.
El lanzamiento del nuevo mercado tecnológico en la Bolsa de Shanghai otorga de nuevo un mayor protagonismo a Huawei. El gigante chino de las telecomunicaciones, señalado por EEUU en su ofensiva comercial, no cotiza hasta la fecha en ningún mercado.
En una reunión celebrada en Japón esta semana, los líderes financieros del mundo señalaron que cada vez estaban más preocupados de que la disputa comercial entre Estados Unidos y China, la cual no muestra ninguna señal de tregua, pueda orillar a la economía mundial hacia una crisis.
La sensación de pesadumbre en la reunión del grupo de las 20 principales economías se produjo en un escenario donde una desaceleración del crecimiento económico mundial cada vez es más evidente debido a la renovada guerra comercial que está librando el presidente Donald Trump con Pekín. En un comunicado final, los funcionarios del G20 concluyeron con una advertencia respecto de que las tensiones comerciales se han “intensificado” y accedieron a enfrentar los riesgos.