La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha asegurado este miércoles que esta semana quedarán reconocidas las 300.000 prestaciones por desempleo de trabajadores incluidos en expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) que estaban pendientes en abril.
«La semana pasada pagamos a más de cinco millones de trabajadores el desempleo. Nos quedaban 300.000 personas por reconocer, se están reconociendo estos días y quedan muy pocos ya y esta semana estarán reconocidos los 300.000 que nos han quedado de finales de abril», ha señalado la ministra.
Díaz ha recordado que su Departamento ha firmado recientemente un acuerdo con las entidades financieras para que abonen antes de junio estas prestaciones a los trabajadores. En total, ha apuntado la ministra, 520.000 empresas han presentado ERTEs, que han afectado a 3,3 millones de trabajadores, frente a los 10 millones de Alemania o los más de 12 millones de Francia.
Ayer entró en vigor el decreto que aprobó ayer el Consejo de Ministros, fruto del acuerdo social, por el que los ERTEs se prolongan en principio hasta el 30 de junio. Díaz ha agradecido a sindicatos y empresarios su trabajo para llegar a este acuerdo y ha destacado la importancia del mismo, ya que desvincula el mecanismo de los ERTEs del estado de alarma.
La titular de Trabajo ha subrayado que, por primera vez, muchas pequeñas empresas y autónomos han descubierto la oportunidad que supone la presentación de un ERTE para no cerrar sus negocios y ha señalado que el decreto permitirá «azuzar» el consumo e ir reactivando poco a poco la economía evitando además el cierre de negocios.
«Hay que darles ánimos a las empresas y decirles que vale la pena continuar con las actividades comerciales. Hay que animar los proyectos empresariales, acompañarlos, y yo creo que hay herramientas suficientes para no tener que vernos abocados a cierres de empresas», ha defendido la ministra.
Díaz ha indicado que no existe «un debate entre salud y economía» y que España «no puede equivocarse en el desconfinamiento» para evitar una marcha atrás. «Hay que ser muy cautos y esperar que lo antes posible podamos reanimar la economía», ha apuntado.