Un total de 13 bancos que operan en España presentaron pérdidas netas en el primer semestre de 2021, frente a 15 entidades que registraron ‘números rojos’ durante el mismo periodo del año anterior, según recogen los estados financieros de la banca publicados por el Banco de España.
En la primera mitad del año, perdieron dinero diez bancos asociados a la Asociación Española de Banca (AEB), uno de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y dos sucursales de entidades de crédito extranjeras extracomunitarias.
Liberbank presentó los números negativos más elevados, -50,33 millones, seguido de WiZink (-25 millones), Evo Banco (-10,59 millones), Targobank (-8,77 millones), Wealthprivat Bank -antes denominado Bank Degroof Petercam Spain- (-7,18 millones) y Singular Bank (-6,26 millones de euros).
También registraron pérdidas hasta junio Credit Suisse AG S.E. (-5,16 millones), JP Morgan Chase Bank S.E. (-3,25 millones), Andbank España (-2,24 millones), Banco Pichincha (-1,63 millones), Banco Europeo de Finanzas (-136.000 euros), Banco de Depósitos (-69.000 euros) y Banco Alcalá (-39.000 euros).
Estas trece entidades arrojaron unas pérdidas conjuntas de 120,65 millones de euros en el primer semestre. En el mismo periodo del año anterior, marcado por las fuertes provisiones ante la irrupción de la pandemia del coronavirus, quince bancos sumaron pérdidas de 8.621 millones de euros, destacando las contabilizadas por Santander y BBVA.
Las entidades que hace un año presentaron un resultado positivo y que en este semestre han sufrido pérdidas netas son WiZink, Evo Banco, Banco Alcalá y Credit Suisse AG.
Por el contrario, Santander, BBVA, Nuevo Micro Bank, Banco Industrial de Bilbao, Ibercaja Banco y CaixaBank, que hace un año se encontraban entre las entidades que perdían dinero en España, abandonaron los ‘números rojos’ y lograron beneficios en el primer semestre de 2021.
En el primer semestre de 2020, las entidades financieras supervisadas por el Banco de España presentaron pérdidas conjuntas de 7.200 millones de euros, tras sacrificar parte de sus ganancias, incurriendo en pérdidas históricas en algunos casos, para blindar su balance ante el aumento del riesgo derivado de la crisis económica que habían ocasionado las medidas de contingencia implementadas para mitigar la expansión del coronavirus.
Sin embargo, durante el primer semestre de este año las entidades financieras realizaron menos dotaciones adicionales, gracias a las mejores perspectivas macroeconómicas en España.