El Banco de Francia ha bajado su previsión de crecimiento respecto a la economía gala en el primer trimestre del año hasta el 0,3%, lo que supone una décima menos de lo que había calculado hace un mes.
El Banco de Francia publicó esta segunda estimación en un comunicado sobre la base de las encuestas mensuales de coyuntura a los empresarios.
El índice del clima de negocios se incrementó en febrero hasta los 101 puntos, frente a los 99 puntos alcanzados en enero, lo que significa que superó el nivel 100 que marca la media de largo plazo.
En los servicios, el índice se quedó sin cambios en 101 puntos y tampoco se movió el de los servicios, con 105 puntos.
La corrección a la baja por parte del Banco de Francia ha coincidido con el movimiento general de disminución de las expectativas económicas de los grandes institutos de coyuntura por la ralentización que se constata en todo el mundo, y muy especialmente en Europa.
Hace una semana, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) señaló en su informe interino de perspectivas que el PIB de Francia, después de haber progresado un 1,5% en el 2018, se elevará un 1,3% tanto en 2019 como en 2020.
Los analistas han destacado que esto supone para 2019 tres décimas menos de lo que la propia OCDE había anticipado a finales del mes de noviembre y dos décimas menos para el año 2020.
En el mes de febrero, la Comisión Europea modificó a la baja sus cifras en febrero y señaló que la expansión económica en Francia se iba a limitar este año al 1,3%, netamente por debajo del 1,7% con el que confiaba el Gobierno.