Los sindicatos griegos han convocado una huelga general, el 16 de julio, de 24 horas como protesta a los recortes de empleo públicos que establece el Gobierno, para cumplir con lo acordado con la troika.
Entre las medidas que el país acordó con la Unión Europea y el FMI se encuentran los recortes de vigilantes escolares, policías municipales y demás puestos de los gobiernos locales.
La troika ha asegurado que el progreso del país es muy lento y que aún no se cumplen las condiciones de la reducción de 600.000 puestos de trabajo en el sector público.
Los trabajadores se encuentran molestos con el fondo de movilidad a iniciarse en septiembre, y que afectará a 25.000 antes de finalizar el año.
Desde que el Gobierno acordó la reducción de la administración pública, se han vuelto a presentar protestas, aunque por ahora menos violentas que las sufridas el año pasado.