La firma de corretaje XTB ha detallado que el sector financiero será el más afectado del Ibex 35, con una proyección «bastante negativa», por las medidas que pretende llevar a cabo el nuevo Gobierno para «incrementar la presión» en este sector, el de mayor peso en el índice.
«La banca es un sector que ya está lastrado a nivel global por el panorama de tipos cero y negativos. El hecho de que el Gobierno plantee gravar aún más sus transacciones… veremos dónde acaba», ha expresado el analista de XTB Darío García.
La conocida como ‘tasa Tobin’ busca gravar las transacciones financieras de compra de acciones para entidades españolas de más de 1.000 millones de capitalización, es decir, prácticamente todas las empresas del índice, ha explicado el analista.
Por entidades, los dos bancos más grandes, Santander y BBVA, serán los más impactados por el riesgo divisa a nivel global, además del impacto local. «En el análisis de ambos valores tenemos una referencia de mínimos, mientras que los máximos están extremadamente limitados por la continuación de máximos decrecientes y es bastante improbable que puedan romper esa resistencia», ha detallado García.
Por su parte, Bankia, participada al 51% por el Estado a través de Frob, «no parece que vaya a cambiar su política de alta rentabilidad de dividendo hasta que recupere el importe del rescate de la entidad». Por ello, podría ser el banco que tenga «mejor desempeño», ha sostenido el experto, que ha valorado que su precio está «por los suelos» por lo que es interesante para «comprar y mantener para recibir una rentabilidad por dividendo interesante».
Por otro lado, el bróker XTB tiene una proyección «bastante negativa» también sobre el sector energético en tanto que el programa de coalición del nuevo Gobierno hace énfasis en la necesidad de impulsar un nuevo modelo. No obstante, García ha destacado la «buena gestión inorgánica» de Iberdrola, «predestinada a implantar las electrolineras» en España, y cuya cotización «debería mantenerse».
«Tanto Unidas Podemos como PSOE tienen bastante confluencia en gravar a las empresas y subir el impuesto de sociedades, poniendo una lupa más grande en los beneficios», ha sostenido el analista.
En esa línea, García ha matizado que las posibles medidas fiscales restrictivas que afecten a los beneficios empresariales tendrán finalmente efecto en las políticas de reparto de dividendos y, por ende, repercutirán en los accionistas.