Los precios de las viviendas británicas han subido al ritmo más lento en seis años en el periodo comprendido entre los meses de septiembre y noviembre de 2018.
La sociedad hipotecaria Halifax, encargada de publicar estos datos, ha explicado que estas cifras traen una señal más de debilidad en el mercado inmobiliario a medida que se acerca el Brexit.
Halifax ha señalado que el crecimiento anual de los precios de la vivienda se ha desacelerado bruscamente, hasta el 0,3 por ciento, desde el 1,5 por ciento registrado en los meses comprendidos entre agosto y octubre.
El índice de precios de la vivienda de Halifax se elevó a un ritmo de casi un 10 por ciento al año en el momento de la votación de Brexit, en el año 2016.
En el mes de noviembre, los precios de las viviendas en el Reino Unido registraron una caída del 1,4 por ciento mensual, lo que supone la tercera caída en los últimos cuatro meses y la mayor caída desde abril.
Los analistas inmobiliarios han señalado que el factor principal que impide que los precios bajen de manera pronunciada es la escasez de viviendas en el mercado, aunque los especialistas han indicado que algunas medidas han permitido que los precios en Londres caigan.
Howard Archer, economista de EY Item Club, ha señalado que los precios podrían registrar una caída moderada a nivel nacional si el Reino Unido llega a abandonar la Unión Europea en el mes de marzo sin que se establezca un acuerdo formal.
Desde la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea, muchas familias han visto una depreciación de su poder adquisitivo como consecuencia de una inflación que ha ido incrementándose más velozmente que el ritmo de avance de los salarios, y una incertidumbre sobre el contexto económico británico que ha tenido un claro impacto sobre el mercado inmobiliario.