Rusia aspira alcanzar, a medio plazo, un precio de 50 dólares estadounidenses por cada barril de crudo, de acuerdo a lo que ha dicho este martes el ministro de Energía, Alexander Novak.
El ministro de Energía ha dicho durante una entrevista concedida a la cadena pública de televisión Rossia 24 que “Rusia aspira a un escenario bastante conservador, y creemos que a mediano plazo los precios del petróleo se ubicarán alrededor de los 50 dólares” y ha agregado “nuestras previsiones de desarrollo socioeconómico se apoyan sobre este precio”.
El presupuesto de Rusia para este año ha sido calculado a partir de una base de 42 dólares por barril de petróleo, un mínimo en diez años, de acuerdo a una información reseñada por Bloomberg.
El petróleo y el gas representan prácticamente la mitad de los ingresos de os presupuestos de Rusia, a pesar de sus constantes esfuerzos por diversificar su economía.
El Gobierno de Moscú ha estado aplicando desde hace varios años una política presupuestaria y fiscal muy estricta, con el fin de reducir su “sensibilidad” respecto a los precios del petróleo.
En los últimos años, Rusia ha cooperado con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), un organismo que el país no integra y del cual Arabia Saudita es líder, para limitar la oferta, lo que ha permitido incrementar los precios después del colapso vivido entre los años 2014-2015.
Los precios se aumentaron a mediados del mes de septiembre después de los ataques registrados contra las infraestructuras petroleras sauditas, pero desde ese momento han ido cayendo bruscamente en un contexto de preocupaciones en cuanto a la salud de la economía global.
Esta semana, en Londres, el barril de crudo Brent del mar del Norte para entrega en el mes de diciembre vendía a 57,80 dólares, o sea, un 0,94% menos que al cierre del lunes.