El índice compuesto de indicadores líderes elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para el pasado mes de agosto, refleja una mejoría de las grandes economías, aunque con comportamientos dispares entre los países emergentes.
Según ha informado la OCDE en un comunicado, el indicador global, diseñado para anticipar los puntos de inflexión de la tendencia de la actividad económica, registró en agosto un incremento de una décima respecto al mes anterior, hasta los 100,6 puntos, después de dos meses estable en los 100,5 puntos.
En el caso de España, el indicador compuesto aumentó desde los 101,8 puntos hasta los 102 enteros, lo que sitúa el dato por encima del conjunto de los países de la OCDE y del índice de la eurozona, que subió desde los 100,4 puntos hasta los 100,6 puntos.
Por países, los índices de Estados Unidos (estable en los 100,9 puntos por tercer mes consecutivo) y Japón (estable por tercer mes en los 101 puntos) indican que su crecimiento está por encima de su tendencia.
Por su parte, el dato de Reino Unido, que aumentó desde los 100,9 puntos a los 101,2 enteros, sigue apuntando a un crecimiento económico «firme», mientras que el de Canadá, que repuntó desde los 99,6 puntos hasta los 99,8 puntos, indica un «cambio positivo en el impulso».
En el conjunto de la eurozona, los datos indican una mejora del impulso del crecimiento. En el caso concreto de Alemania (donde aumentó desde los 100,3 puntos hasta 100,4 puntos), el indicador muestra un crecimiento «firme».
Asimismo, el indicador de Francia, que subió desde los 99,6 puntos hasta los 99,7 puntos, apunta «más claramente a un cambio positivo en el impulso», mientras que el de Italia, que subió desde los 100,5 puntos hasta los 100,7 enteros, sigue mostrando un cambio positivo en el impulso económico.
En el caso de China, cuyo indicador se mantuvo estable en los 99,3 puntos, la OCDE ve un crecimiento regresando a su tendencia, mientras que en el de Rusia, donde el índice subió desde los 99,3 puntos hasta los 99,4 puntos, constata un «incierto cambio positivo en el impulso».
Respecto a Brasil e India, los indicadores económicos reflejan un crecimiento inferior al señalado por su tendencia: el índice del primero ha pasado de 98,9 puntos a 98,8 puntos, y en cuanto al segundo, ha descendido desde los 97,1 puntos hasta los 97.