La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) ha señalado que la inversión extranjera directa (IED) podría reducirse en un 5% – 15% a nivel mundial frente a las previsiones iniciales, debido al impacto del coronavirus.
El organismo ha agregado que esto generará un crecimiento marginal en 2020 – 2021, donde los sectores automotriz, aéreo y energético serán más afectados.
De las 100 compañías multinacionales que supervisa la UNCTAD como un barómetro económico mundial, muchas están ralentizando el gasto de capital en zonas afectadas y 41 han emitido una serie de advertencias de beneficios, que van a afectar a las ganancias reinvertidas, un gran motor de la IED.
La mayoría de las advertencias de beneficios es de firmas expuestas a los consumidores, lo que muestra que por ahora se espera que la desaceleración de la demanda tenga efectos más directos sobre las ganancias que la producción o las disrupciones en las cadenas de suministro.
Una muestra más amplia de las 5.000 principales empresas que cotizan en bolsa ha presentado previsiones de beneficios para el año fiscal de 2020 revisadas a la baja en el último mes en un 9% de promedio por el nuevo virus, que ha infectado a más de 100.000 personas.
De acuerdo a lo que ha indicado la UNCTAD, la industria automotriz (-44%), las aerolíneas (-42%) y la de energía y materiales básicos (-13%) han sido las más afectadas y ha agregado que “es probable que las revisiones realizadas hasta la fecha sean conservadoras. Es probable que el impacto negativo del virus se extienda y aumente más”.
A principios de año, la UNCTAD estimó que los flujos de IED en 2019 fueron de 1,39 billones de dólares (1,21 billones de euros) y esperaba un alza del 5% en el conjunto de 2020. Actualmente, piensa que podrían haber tocado su nivel más bajo desde la crisis financiera de 2008 si el brote del coronavirus se sigue propagando.