La rentabilidad del bono italiano con vencimiento a diez años se ha elevado a máximos desde el 2014, al ubicarse este lunes por encima del 3,5%, ante la incertidumbre que existe sobre los planes de expansión presupuestaria planteados por el Gobierno, que además ha pedido a las agencias de calificación que no tengan «prejuicios» cuando actualicen este mes el rating italiano.
El interés ofrecido a los inversores por el bono de Italia con vencimiento a diez años ha alcanzado el 3,581% respecto al 3,409% del cierre del pasado viernes, lo que representa el mayor coste de financiación desde el mes de febrero de 2014, ampliando la diferencia en relación con el ‘bund’ hasta los 304 puntos básicos.
Por otro lado, la rentabilidad de la deuda de España a diez años se situó este lunes en el 1,588% en comparación al 1,581% del pasado viernes, con un diferencial en relación con el bono alemán equivalente de 106 puntos básicos.
En una entrevista ofrecida a la emisora italiana ‘RTL 102.5’, Matteo Salvini, vice primer ministro de Italia, ha manifestado su confianza en que «nadie, empezando por las agencias de rating, tengan prejuicios sobre Italia».
Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, dijo este fin de semana que el organismo no va a interferir en la planificación de los Presupuestos por parte del Gobierno de Italia, aunque detalló que va a proponer cambios «en caso de ser necesario».
Asimismo, señaló que «está en manos de los responsables políticos italianos encontrar las normas y medidas que permitirán a Italia permanecer dentro de los objetivos presupuestarios acordados».
La agencia de calificación S&P Global prevé actualizar a finales de mes su calificación de la deuda soberana de Italia, que en estos momentos se ubica en ‘BBB’ con perspectiva estable, mientras que Moody’s anunciará su decisión sobre la nota ‘Baa2’, que mantiene bajo vigilancia para una posible rebaja.