El Gobierno de Estados Unidos comenzará a tener una mayor reserva de efectivo para cuando no pueda acudir a los mercados de deuda. Esta medida podría ayudar a pagar cuentas durante un desastre natural, un ciberataque o incluso una crisis por el techo de la deuda.
El Tesoro de Estados Unidos también ha comunicado que comenzará a elevar el nivel de deuda de corto plazo en el mercado para atender la demanda de notas, que se incrementó con las normas que entraron en vigor desde la crisis financiera de 2007-2009 pidiendo a las firmas que mantengan más títulos líquidos.
En este sentido, el Tesoro tratará de mantener suficiente efectivo para cubrir alrededor de una semana de gastos federales, es decir, entre 200.000 millones de dólares (176.389 millones de euros) y 225.000 millones de dólares (198.437 millones de euros), muy por encima de los 80.000 millones de dólares (70 millones de euros) que mantuvo en años anteriores.
Seth Carpenter, Subsecretario de Mercados Financieros, ha señalado que “el Tesoro piensa que es prudente cambiar su política de manejo de fondos a partir de este mes” citando “amenazas emergentes” como posibles ciberataques.
Una gran reserva de efectivo permitiría al Gobierno de Estados Unidos pagar las cuentas de la nación cuando no pueda pedir prestado a inversores en subastas semanales. Eso podría ser muy útil en dado caso de que Wall Street se vea afectada por huracanes o hackers.
Por otra parte, un mayor colchón de fondos facilitaría pagos a las cuentas si no aparecen suficientes inversores en alguna subasta durante una crisis política. Como ejemplo, Seth Carpenter ha citado el año 2011 cuando el Gobierno estuvo cerca de quedarse sin dinero mientras el Congreso debatía la elevación del límite de endeudamiento.