El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, declaró antes de la junta general de accionistas celebrada esta semana en Madrid, que Naturgy invertirá 2.000 millones de euros en este año, de los que un 70% (unos 1.400 millones) serán en España. Las inversiones dentro de nuestras fronteras se destinarán a aumentar la generación de energía renovable de la compañía en un gigavatio respecto a 2018. No obstante, el año pasado Naturgy destinó 2.321 millones a este tipo de gasto, un 16% más que la previsión para 2019.
Reynés aclaró que las cifras publicadas no incluyen inversiones inorgánicas para no estar atados a compromisos que no sean compatibles con nuestra política de inversión, pero destacó que están abiertos a cualquier operación si se cumple con los objetivos de rentabilidad mínima que nos hemos marcado. El presidente comentó que la firma quiere ser una compañía cada vez más eléctrica, pero manteniendo el negocio gasista. Así, se destinarán unos 175 millones de euros a inversiones en redes de distribución eléctrica y en torno a unos 220 millones a redes gasistas.
Además, el presidente de la compañía, señaló que el paquete de energía y clima presentado por el Gobierno es una buena declaración de objetivos medioambientales. “Lo más relevante es tener una hora de ruta clara. Estoy seguro de que independientemente de quién gane, la hoja de ruta va ser parecida, porque está influenciada por lo que quieren los países del entorno”, afirmó Reynés que el plan va en línea con los objetivos de Naturgy.
En relación a los planes para el cierre del carbón, Reynés destacó que “la situación hoy tanto de los precios del carbón como el de los derechos CO2 hacen inviables las plantas de generación de carbón. Más triste que una fábrica parada es una en marcha que pierde dinero”. En este aspecto, y tras el anuncio de cierre de las centrales de Meirama, La Robla o Narcea, el presidente de Naturgy ha explicado que están en estudio varios planes para evitar la pérdida masiva de empleos con el desmantelamiento.
Durante la junta de accionistas, quedaron aprobados los resultados, así como la gestión del equipo directivo en el primer ejercicio de su nuevo Plan Estratégico. Además, la junta aprobó, con cargo de los resultados 2018, un dividendo total de 1.300 millones de euros en efectivo, recogido en su Plan Estratégico. Esta cifra representa el pago en efectivo de 1,30 euros por acción, un 30% más que en 2017. De este importe, la compañía ya abonó 0,28 euros el pasado mes de julio y 0,45 euros en el mes de noviembre. El próximo día 20 de marzo, se abonará en efectivo el tercer pago con un dividendo complementario de 0,57 euros por acción.
Los accionistas aprobaron también la reducción de capital mediante amortización, antes del 30 de julio, de hasta 19 millones de acciones propias dentro del programa share buy back que la compañía puso en marcha tras la presentación del Plan Estratégico. Este programa, ha informado la compañía, que persigue aumentar la remuneración total al accionista en caso de ausencia de oportunidades de inversión inorgánica que encajaran con las líneas de crecimiento estratégico de Naturgy.
“El 2018 fue un ejercicio de relanzamiento. Un año en el que Naturgy definió las bases de su transformación para convertirse en un referente internacional, en el que presentamos una hoja de ruta hasta 2022 y un plan de acción claro basado en nuestros cuatro pilares fundamentales para la creación de valor. También estrenamos nueva estructura accionarial, renovamos el Consejo de Administración e implementamos una nueva estructura directiva, hitos relevantes de este ejercicio en donde destaca nuestro compromiso plasmado en el Plan Estratégico 2018-2022”, remarcó Francisco Reynés ante los accionistas.