La inflación media en tasa interanual de los países integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se situó en julio pasado en el 5,4%, desde el 5,6% de junio, lo que representa su menor avance desde octubre de 2021.
Según los datos publicados por el ‘think tank’ de las economías avanzadas, la tasa de inflación general en julio creció en 17 de los 38 países de la OCDE, disminuyó en 11 y permaneció mayormente estable o sin cambios en 10.
El menor alza de los precios se produjo a pesar de que el coste de la energía repuntó un 3,3% interanual en julio frente al 2,3% del mes previo, su mayor nivel desde febrero de 2023. De su lado, el encarecimiento de los alimentos se ralentizó, aunque sin un patrón claro entre países.
La inflación subyacente de la OCDE, que no tiene en cuenta los precios de la energía y de los alimentos frescos, se ubicó en julio pasado en el 5,5%, lo que implica cuatro décimas menos respecto a la cifra de junio.