Los salarios han caído un 6,2% respecto a 2012, según afirma el sindicato CC.OO., lo que supone la pérdida para los trabajadores de 7.294 millones.
Según el secretario de Estudios de CC.OO., Rodolfo Benito, la creciente desigualdad en el reparto de la renta entre los beneficios empresariales y la remuneración de los trabajadores es el principal factor de la desigualdad estructural que existe en España.
Así se recoge también en un informe elaborado por la Fundación 1º de Mayo del sindicato, en el que se denuncia que España es el segundo país de Europa en términos de desigualdad, tan sólo por detrás de Letonia.
El sindicato asegura que la desigualdad «no es una consecuencia natural de la crisis, sino de las políticas de recortes sociales que se están poniendo en marcha».
En este sentido, CC.OO. destaca que lejos de corregir la desigualdad, los mercados no hacen sino intensificarla, «presionando a la baja sobre el factor trabajo e invadiendo cada vez más espacios de prestaciones públicas que son esenciales para la cohesión social».
España, que había acortado la distancia en materia de desigualdad con respecto a la media de la UE, con una diferencia de tan solo 0,5 puntos en el índice de Gini en 2008, ha visto acrecentada esta diferencia hasta situarse en torno a los 4,5 puntos en 2012.
En opinión del secretario de Estudios de CC.OO., «la expansión de la economía financiera ha supuesto una gran concentración de poder económico que, situándose al margen de todo control político y social, tiene una gran capacidad de decisión sobre la economía real, la acción política y la configuración social».