Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), ha defendido que «lo último» que se necesita en este momento es «una relajación de la regulación» del sector bancario, en referencia a las órdenes firmadas por Donald Trump de cara a revocar la principal ley reguladora estadounidense.
«La última cosa que necesitamos es una relajación de la regulación», dijo el jefe del supervisor bancario de la eurozona durante una comparecencia en la comisión de Asuntos Económicos de la Eurocámara.
«La idea de repetir las condiciones que había antes de la crisis es algo muy preocupante», añadió Draghi.
Además, Draghi detalló que la recuperación económica de la zona euro sigue cobrando fuerza pero continúa requiriendo estímulos, por lo que el Banco Central Europeo no está preparado para retirar el apoyo.
La inflación puede estar repuntando pero se debe en gran medida al impacto extraordinario de la subida del precio del petróleo y el BCE estudiará la inflación aunque la considere temporal, dijo Draghi a un comité de asuntos económicos del Parlamento Europeo.
«El apoyo de nuestras medidas de política monetaria siguen siendo necesarias si las tasas de inflación se disponen a converger hacia nuestro objetivo con suficiente confianza y de forma sostenible», dijo Draghi.
«Nuestra estrategia de política monetaria prescribe que no deberíamos reaccionar a datos individuales y subidas a corto plazo en inflación», dijo Mario Draghi. «Por lo tanto continuaremos estudiando los cambios en la inflación armonizada si creemos que no afectará a las perspectivas a medio plazo para la estabilidad de precios», agregó.