Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) han pactado este martes los elementos generales de un paquete de medidas encaminadas a reducir los riesgos a los que se enfrenta el sector bancario europeo, un aspecto que abriría la puerta a mayores progresos en propuestas que buscan una mayor mutualización de los mismos, como el fondo único de garantía de depósitos.
Los Veintiocho han respaldado el acuerdo preliminar alcanzado el pasado 22 de noviembre con los negociadores del Parlamento Europeo. El paquete de medidas debe completarse todavía a nivel técnico antes de que finalice el año.
En concreto, cuando sea adoptado introducirá en la legislación comunitaria reformas acordadas a nivel internacional tras la crisis financiera tanto por el Comité de Supervisión Bancaria de Basilea como por el Consejo de Estabilidad Financiera.
Así, las nuevas normas buscan fortalecer el marco de resoluciones bancarias y los requisitos de capital, con el objetivo de reducir los incentivos para la asunción de riesgos, incluidos un ratio de apalancamiento obligatorio, un coeficiente obligatorio de financiación estable neta (NSFR) y nuevas reglas para la comercialización de acciones y derivados.
También introducen la posibilidad de que las autoridades de resolución impongan los llamados ‘corralitos’ (suspensión temporal de ciertos pagos y obligaciones contractuales) cuando se encuentran en un proceso de resolución.
Otro de los elementos importantes es una serie de medidas encaminadas a mejorar la capacidad de préstamo de los bancos a través de una disminución de la burocracia que deben asumir los bancos «más pequeños y menos complejos» o reduciendo los costes que supone emitir o poseer ciertos instrumentos financieros, como bonos garantizados.
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha intervenido en el debate de los ministros para felicitarles por el acuerdo, puesto que es «una parte importante de la agenda de reducción de riesgos» del sector financiero que «debe facilitar el camino para completar la Unión Bancaria y la Unión para el Mercado de Capitales».
Sin embargo, ha advertido de que el plan de venta «masiva» de préstamos dudosos (NPL, por sus siglas en inglés) puede tener un «impacto muy específico» en los modelos internos y puede «no ser totalmente compatible» con los estándares acordados por el Comité de Basilea.
El ministro de Finanzas de Austria, Hartwig Löger, que este semestre ostenta la presidencia de turno del Ecofin, ha destacado por su parte que se ha dado «un paso importante» para completar la Unión Bancaria. «Las medidas crearán las condiciones para tomar decisiones ambiciosas para reformar la eurozona», ha apuntado.