El precio de la vivienda terminada, nueva y usada, subió un 0,5% interanual en el primer trimestre del año, hasta los 1.390 euros por metro cuadrado, constatando el freno en los precios experimentado en los últimos meses de 2020 y el «escenario de estabilización» hacia el que se encamina el mercado, según el índice IMIE Mercados Locales de Tinsa.
Pese a esta fuerte moderación en el crecimiento de los precios, la vivienda es hoy un 16% más cara que en el primer trimestre de 2015, cuando se alcanzaron valores mínimos, y se mantiene un 32% por debajo de los máximos de 2007.
Dentro del escenario de estabilización en el que ha adentrado el mercado, Tinsa prevé que a corto plazo se produzcan «marcadas variaciones de precios al alza o a la baja», principalmente en los mercados menos dinámicos y de valores medios más bajos.
Por comunidades autónomas, once de ellas presentaron en el primer trimestre valores inferiores a los de un año antes, especialmente Navarra (-8,8%), La Rioja (-7,7%) y Aragón (-5%). En Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid, los ajustes en el precio se moderaron hasta registrar descensos anuales del 0,4%, del 0,7% y del 1,3%, respectivamente.
Tras dos trimestres en los que la mayoría de las comunidades experimentaron recortes de precios, en el primer trimestre de 2021 se han comenzado a registrar algunas tasas positivas.
En este sentido, los mayores incrementos interanuales en los precios de la vivienda los experimentaron en el primer trimestre Baleares (+4,8%), País Vasco (+4,4%) y Canarias (+4,1%).
A nivel provincial, la recuperación observada en algunas provincias no llega a compensar el descenso de los precios producido tras el inicio de la pandemia. Así, según Tinsa, once provincias siguen registrando descensos interanuales superiores al 5%, destacando Ourense y Palencia, con los mayores ajustes en el último año, superiores al 10%.
Entre las provincias que han incrementado sus precios medios en el último año, cuatro superan una tasa del 5%: A Coruña, Cuenca, Lleida y Vizcaya.