Esade prevé un crecimiento de la economía de España del 1,7% en 2020, una décima menos que la estimación del Gobierno, con el consumo como principal motor, y que la tasa de paro se ubicará en el 13,5% y el déficit permanezca en torno al 2% del PIB.
Ante este contexto, la escuela de negocios aboga por acometer reformas estructurales y por la prudencia respecto a la reversión de la reforma laboral.
El profesor visitante de Esade y director del informe, José Ignacio Conde-Ruiz, ha explicado que este año será un ejercicio de «impasse» ante los numerosos aspectos de incertidumbre, como los Presupuestos de 2020, los cambios en la reforma laboral, la guerra comercial o el Brexit, y tras un 2019 «complicado».
Conde-Ruiz ha señalado que el consumo de los hogares se mantendrá como el principal motor de crecimiento, aunque la «ligera desaceleración» se deberá a la menor aportación de todos los sectores de actividad, y a la desaceleración de la inversión empresarial.
A falta de conocer los detalles de los Presupuestos, Esade ha dicho que es probable que la tasa de paro siga bajando a un ritmo inferior, hasta ubicarse en el 13,5% este año, pero advierte que perduran problemas importantes en el mercado, ante una «altísima» precariedad laboral y el elevado paro de larga duración.
Por otro lado, la escuela de negocios ha dicho que el déficit público cerró en 2019 en el mismo nivel que el ejercicio anterior, en el entorno del 2,4% del PIB. Por esta razón, Conde-Ruiz ha destacado que hay que mantener el control sobre ese desajuste, porque la Comisión Europea reclama un ajuste adicional del 0,65% este año.
Los analistas del Esade han apuntado que, con una previsión de un tono «ligeramente expansivo» de la política social, el déficit público se ubicará en el 2% este año por la propia evolución cíclica, debido a que hay «poco espacio» para una expansión fiscal mayor.