La agencia de calificación Moody’s ha anunciado la mejora en dos peldaños, de ‘B3’ a ‘B1’, de la nota de la deuda soberana griega, y ha modificado la perspectiva de ‘positiva’ a ‘estable’, debido a que el programa de reformas está siendo efectivo.
En un comunicado, la agencia señala que las reformas aplicadas están empezando a dar frutos y «hay poco riesgo» de que sean revertidas si se mantiene una estrecha vigilancia por parte de las instituciones acreedoras.
Además, la evolución fiscal está siendo «sólida» y todo apunta a que seguirá estándolo, ya que su mejora se debe a que se han aplicado reformas «estructurales», añade.
Moody’s considera, además, que la sostenibilidad de la deuda pública ha mejorado a mediano plazo gracias al paquete de medidas de alivio aprobadas en junio del año pasado.
A ello se añade que el Estado ha restablecido con éxito una financiación a través del mercado, respaldada por una gran reserva de efectivo y un fuerte respaldo de los acreedores.
El rendimiento del bono griego a diez años cayó la semana anterior a su nivel más bajo de los últimos 13 años y quedó en 3,645 %, mientras que la prima de riesgo respecto al bono alemán se situó en 345 puntos básicos, su mínimo desde el 2 de abril de 2010.
Los analistas esperan que la Autoridad de Gestión de la Deuda Pública (PDMA) emita en los próximos días un bono a siete o diez años, tras el éxito de la subasta de títulos a cinco años el pasado 29 de enero, la primera que se realizaba tras la salida del rescate, en la que el rendimiento quedó en 3,6 %.
En el caso de que se emita dicho bono a diez años, se tratará de la primera subasta a este plazo desde 2010.
Días atrás, el Comisario Europeo de Asuntos Económicos Pierre Moscovici subraya en un tuit que algunos desequilibrios han sido corregidos gracias al crecimiento económico y a la acción política. En el apartado de desequilibrios sitúa entre otros países a España, Italia, Grecia, Francia o Alemania por muy distintas causas.
Para Moscovici, Grecia está en la ruta que les fue impuesta por las instituciones europeas: «Se ha trabajado mucho. Grecia está en el camino correcto, pero hay algunos desequilibrios que son bastante lógicos después de la salida del programa que deben corregirse. Todavía hay trabajo por hacer».