DBRS ha señalado que la banca española podría tardar 3 años en reducir los activos improductivos (NPLs) hasta niveles precrisis, si mantiene el ritmo actual.
La agencia de Canadá considera que los bancos de España están listos para «comenzar un nuevo capítulo en la calidad de sus activos», gracias a los esfuerzos de los últimos doce meses y al compromiso de las entidades por seguir reduciendo el peso de este tipo de activos en sus balances.
Además, ha dicho que el sector se va a beneficiar de las perspectivas económicas actuales, del entorno positivo del mercado inmobiliario español y del interés de los inversores por los activos inmobiliarios españoles.
No obstante, la agencia ha alertado de que algunos bancos podrían reforzar sus niveles de cobertura si desean acelerar la reducción de activos adjudicados para aprovechar el interés de los inversores por los activos inmobiliarios en España.
DBRS ha detallado que los activos improductivos se han reducido y la mayoría de los bancos españoles se está acercando a la media europea, aunque si mantiene el ritmo actual la banca podría tardar hasta tres años en reducirlos hasta niveles previos a la crisis.
Por otro lado, los bancos españoles redujeron en un -77% su volumen de adjudicados en el primer semestre, hasta los 16.900 millones de euros, debido a las ventas a inversores, aunque DBRS ha señalado que algunas entidades cuentan con un volumen de activos adjudicados relativamente alto.
Los expertos esperan que los bancos medianos con niveles moderados de adjudicados sigan centrando en la gestión de su exposición inmobiliaria a través de ventas minoristas, a la vez que los bancos con un mayor stock tratan de llegar a acuerdos con los inversores con el fin de eliminar los riesgos de sus balances.
DBRS ha señalado que las entidades bancarias de España han cerrado de forma exitosa las principales transacciones de activos adjudicados con los inversores, mientras que las ventas de improductivos no han tenido tanto peso como en Italia o Irlanda.
La agencia considera que es poco probable que los bancos españoles concreten grandes ventas de activos improductivos similares a las realizadas con activos adjudicados. Por el contrario, espera que se recuperen estos créditos por la vía de la ejecución hipotecaria.