El precio de la vivienda en Reino Unido ha subido en el mes julio, el mayor aumento mensual en 11 años, una muestra de que algunas partes de la economía están repuntando rápidamente tras el levantamiento de las restricciones por coronavirus.
El prestamista hipotecario Nationwide ha señalado que el precio medio de la vivienda se ha elevado un 1,7% mensual en julio, por encima de todas las previsiones de una encuesta de Reuters. Este incremento supone el mayor aumento mensual desde agosto de 2009, cuando el mercado se estaba recuperando de la crisis financiera.
Robert Gardner, el economista jefe de Nationwide, ha señalado que “el repunte de los precios refleja la inesperada y rápida recuperación de la actividad del mercado de la vivienda desde que se relajaron las restricciones de confinamiento”.
El Banco de Inglaterra ha informado que las aprobaciones de las hipotecas, el primer paso para la compra de viviendas, se han cuadruplicaron en el mes de junio, después de haber alcanzado un mínimo histórico en mayo, aunque se han mantenido más de un 40% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.
Gardner ha destacado que, en estos momentos, la vivienda es un 1,5% más cara que hace un año, aunque en términos corregidos del efecto calendario, los precios son un 1,6% inferiores al pico alcanzado en abril.
El prestamista hipotecario espera que el aumento de los precios se mantenga en el corto plazo, gracias a un recorte temporal del impuesto sobre la compra de inmuebles que el ministro de finanzas Rishi Sunak anunció este mes con el objetivo de favorecer la recuperación de la economía.
No obstante, Gardner ha apuntado que es posible que estos encarecimientos en el Reino Unido sean un “falso amanecer” si el desempleo se dispara a finales de 2020, cuando terminen las iniciativas públicas para proteger el mercado laboral con suspensiones temporales de empleo financiados por el Estado.