Los precios del aluminio y el plomo han caído esta semana a mínimos en más de dos años debido a las ventas de fondos tras la expiración de opciones en los contratos, ante los temores de la demanda de China, el principal consumidor mundial de metales.
La mayoría de los metales había mostrado una tendencia alcista al comienzo de la sesión del miércoles, y los operadores dijeron que no hubo noticias específicas que generaran el fuerte cambio de dirección. Muchos mercados estuvieron cerrados por el Día Internacional del Trabajador.
Un operador de una importante correduría ha asegurado que “el mercado se asustó y hemos visto bastantes órdenes de frenar pérdidas en el zinc y el cobre. Fue más una venta técnica en un mercado con bajos volúmenes”. Asimismo ha agregado que “la mayoría de las ventas son de ‘algos’ (fondos algorítmicos dirigidos por computadoras) y también tuvimos opciones que expiraron esta mañana, así que mucha gente tuvo que cubrir posiciones”.
El plomo de la Bolsa de Metales de Londres ha caído un 3,7 por ciento, hasta los 1.852 dólares la tonelada, la cifra más baja que se ha registrado desde el 16 de agosto y su mayor descenso porcentual diario desde agosto del año pasado.
Por otro lado, el aluminio ha tocado un mínimo desde enero de 2017 de 1.784,80 dólares antes de repuntar y terminar con un alza de un 1 por ciento a 1.815 dólares. El cobre ha bajado un 2,8 por ciento, a 6.235 dólares por tonelada, el menor nivel obtenido desde el 18 de febrero y después de haber cerrado el mes de abril con una pérdida de 1 por ciento.
Los inventarios de cobre en los depósitos, supervisados por la LME, han bajado hasta las 173.575 toneladas. Esta caída ha ayudado a que la prima del cobre al contado sobre el contrato a tres meses se elevara a su nivel más alto en más de un mes, a pesar de haber registrado un incremento reciente en las existencias.