El Banco de Japón ha informado que llevará a cabo las operaciones y compras de activos apropiadas con el fin de proporcionar una amplia liquidez, y garantizar la estabilidad del sector financiero, ante el riesgo que supone la epidemia del coronavirus.
Haruhiko Kuroda, el gobernador del Banco de Japón, ha indicado que «los mercados financieros globales y de capital se han comportado inestables recientemente con creciente incertidumbre sobre las perspectivas de la actividad económica debido a la propagación del nuevo coronavirus».
La declaración, considerada como inusual por medios especializados locales, dice que «el Banco de Japón seguirá de cerca la situación y proporcionará amplia liquidez para garantizar la estabilidad en los mercados financieros a través de operaciones de mercado y compras de activos».
De esta forma, el banco central de Japón se une a su homólogo estadounidense, Jerome Powell, después de que la Reserva Federal de Estados Unidos anunciase el pasado viernes que está dispuesta a intervenir «con todas sus herramientas» en apoyo de la economía.
La economía de Japón está muy cerca de caer en recesión, después de registrar una contracción anualizada del 6,3% en el último trimestre de 2019, tras la subida del IVA del pasado mes de octubre, lo que supone la mayor caída del PIB de Japón desde el segundo trimestre del año 2014.
Los analistas han apuntado que, en términos trimestrales, el PIB de Japón registró entre los meses de octubre y diciembre una contracción del 1,6%, después de crecer un 0,1% en el tercer trimestre, un 0,5% en el segundo trimestre y un 0,6% en los tres primeros meses del año 2019.
Desde el año 2013, el Banco de Japón lleva aplicando medidas de estímulo monetario que incluyen la compra de activos para que el rendimiento de los títulos de referencia se mantenga en torno al 0%. También mantiene la tasa de interés de referencia a corto plazo en el -0,1%.