El sector manufacturero español ha incrementado el crecimiento de su producción en el pasado enero, gracias a los nuevos pedidos, que aumentaron al ritmo más rápido desde el mes de febrero de 2007, según el índice PMI realizado por Markit.
El índice PMI del sector manufacturero se ubicó en enero en 55,4 puntos, en comparación a los 53 puntos alcanzados a finales de 2015, debido a que el ritmo de expansión de la producción se incrementó por tercer mes seguido, lo cual señala sin lugar a dudas una mejora importante de las condiciones operativas y una destacada consolidación de la salud del sistema.
Todo esto se debe gracias a los nuevos pedidos, que se incrementaron al ritmo más fuerte de los últimos nueve años, lo cual también se pudo observar en aquellos originarios del extranjero, y que puso a prueba la capacidad del sector, al aumentar aquellos que estaban pendientes de realizarse.
De igual forma, la tasa de creación de empleo alcanzó su máximo en los últimos cinco meses.
Para los próximos meses, las empresas prevén otro incremento de los nuevos pedidos, que les lleven a aumentar los excedentes de compras y de productos terminados.
En cuanto a las reservas de materias primas, su incremento fue el más elevado desde mayo del año 2004, por las mayores compras realizadas al calor del abaratamiento del combustible y petróleo, además de la reducción de los costes de insumos como acero, lo que provocó una disminución de precios.
Los fabricantes trasladaron a sus clientes esta disminución de los costes, gracias a lo cual se bajaron los precios cobrados, mientras que los plazos de entrega continuaron extendiéndose en el tiempo.
En relación a la eurozona, el crecimiento del sector manufacturero se frenó en enero. Sin embargo, las previsiones para el sector continuaron levemente positivas, con un incremento acelerado del empleo y una cantidad mayor de pedidos pendientes.