El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió hoy en Roma a 14 socios, entre ellos México, España, Italia y Alemania, una mayor cooperación internacional para aliviar los cuellos de botella en las cadenas de suministro mundiales a corto plazo y «abordar las deficiencias» que amenazan la seguridad de sus territorios a largo plazo.
«Tenemos que adoptar medidas para afrontar los problemas de suministro que tenemos», dijo Biden al abrir un acto al margen del G20 de líderes de dos días que acabó en la capital italiana, acompañado por el secretario de Estado, Antony Blinken, y en el que participó el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
Biden argumentó que la pandemia de coronavirus ha evidenciado lo vulnerable que puede llegar a ser el comercio global y lamentó la escasez de distribución de chips, que está afectando a la industria estadounidense y a la de otros países.
«La mejor manera de reducir los retrasos y los problemas en el futuro es trabajar juntos» en las cadenas de suministros, desde materias primas, productos intermedios y terminados, fabricación, envío, logística, almacenamiento y distribución, y apostar por la diversificación «para no depender de ninguna fuente» que pueda poner a estos países en dificultades económicas, dijo.
La Casa Blanca subrayó en un comunicado que el presidente Biden ha hecho de las cadenas de suministro resilientes una de las principales prioridades de su Administración desde el primer día.