La producción industrial de Japón se ha elevado de forma sorpresiva en el pasado mes de abril, a pesar de la fragilidad del sector exportador y de un terremoto que impactó de manera notable en el sur del país durante ese mismo mes, trayendo consigo esperanza en una recuperación económica débil.
El sector manufacturero prevé para los próximos meses que la producción industrial se incremente, apoyando las previsiones del Banco de Japón de que la tercera economía mundial está alcanzando una recuperación moderada.
Los datos fortalecen las esperanzas de algunos analistas que estiman que el consumo privado será impulsado por la esperada decisión del primer ministro Shinzo Abe de aplazar la subida del IVA prevista para el próximo año.
La producción industrial se incrementó un 0,3% en abril en comparación con el mes de marzo, frente a una estimación media que tenía el mercado de una disminución del 1,5%, según datos publicados por el Ministerio de Economía, Comercio e Industria de Japón. En marzo logró un aumento del 3,8%.
Dicho crecimiento se alcanzó a pesar de los seísmos que afectaron a la sureña prefectura japonesa de Kumamoto y provocaron interrupciones en la producción de automóviles y artículos electrónicos en la región.
Las empresas pertenecientes al sector manufacturero y que fueron consultadas por el ministerio prevén que la producción del sector se incremente un 2,2% para mayo y un 0,3% en junio, aunque algunos analistas han alertado sobre obstáculos externos importantes, entre ellos la frágil demanda de productos por parte de los mercados emergentes.
Otros datos publicados esta semana han demostrado que el gasto de las familias japonesas disminuyó un 0,4% en abril en comparación con el mismo mes del año 2015 en términos de precios reales ajustados, lo que supone una estimación media de una caída interanual del 1,4%.
De igual forma, la tasa de desempleo desestacionalizada se mantuvo estable en el 3,2% en abril, según cifras publicadas por el Ministerio de Interior y Comunicaciones de Japón.