Las retribuciones de los directivos de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) se incrementaron sobre la base de balances falsificados, mientras que las prejubilaciones de varios consejeros de la entidad fueron infladas económicamente de una manera fraudulenta, según ha indicado la Fiscalía Anticorrupción.
Al parecer, las cuentas que servían de fondo a las retribuciones de los directivos de la entidad alicantina se basaban en resultados irregulares correspondientes a los años que van del 2008 al 2011. Así lo afirma, al menos, el informe que recoge las conclusiones de la auditoría del Banco de España y la agencia auditora Price Waterhouse Coopers. Según este informe, la falsedad documental se concreta en las cuentas anuales del ejercicio 2010.
Por lo que respecta a los balances de 2008, 2009 y 2011, lo que se han detectado son irregularidades en la contabilidad, registros de activos fallidos o de procedencia dudosa.
Estas prácticas irregulares, asegura la Fiscalía, responden a cobros de los consejeros de la CAM que, por inspirarse en cálculos contables erróneos, no deberían haberse hecho efectivos.
Estas irregularidades dieron lugar a que cinco directivos de la entidad se repartieran 15,5 millones de euros en prejubilaciones, además de percibir una prestación adicional asegurada.