Las startups españolas han superado los 3.500 millones de euros en inversiones en un total de 366 operaciones, lo que supone un 240% más si se compara con los niveles prepandemia.
Estos son los principales datos del estudio ‘Visión del ecosistema startup en España’, realizado por la Fundación Bankinter y presentado por Javier Megías, el director del programa de startups de la fundación.
Megías ha presentado los resultados del estudio en la VII edición del Congreso Nacional de Business Angels, organizado por Bigban Inversores Privados, y en el que se han reunido más de 250 asistentes entre inversores privados, empresarios y corporates.
La apertura del congreso ha estado a cargo de Francisco Polo, Alto comisionado para España Nación Emprendedora; Pilar Bernabé, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia; y Victoria Majadas, presidenta de Bigban Inversores Privados.
Polo ha explicado que el papel del ecosistema inversor nacional es clave para seguir haciendo crecer la nación emprendedora.
Asimismo, ha comentado que «nunca ha habido un momento mejor para la inversión en España y en particular dentro del sector del emprendimiento, gracias a los business angels y quienes invierten en fases tempranas ayudan a su crecimiento».
Por otro lado, Majadas ha destacado la necesidad de establecer una serie de líneas de ayuda para la red de business angels con el objetivo de que las redes de inversores, a través de acciones de formación y networking, lleven a cabo «una labor que contribuye a lograr un mayor volumen de inversión y mayor retorno para nuestros business angels».
En una de las mesas redondas de la jornada, concretamente en la que se debatía cómo dar el paso de startup a scaleup, Iñaki Berenguer, CEO de Coverwallet, ha informado sobre la creación de su propio fondo de inversión internacional de 150 millones.
La ley de startups, cuyo anteproyecto de ley se aprobó el pasado mes de julio, también ha sido protagonista en esta séptima edición del Congreso. Entre los puntos tratados se encuentran, por ejemplo, los efectos favorables que pueden suponer ciertas reducciones fiscales para el sector de la inversión.