Goirigolzarri defiende el rescate bancario

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 Goirigolzarri defiende el rescate bancario

José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, ha afirmado que «la inyección de capital a los bancos se ha realizado para salvar a los depositantes y no a los accionistas ni a los banqueros». Asimismo, ha indicado que las ayudas recibidas del Estado retornarán a éste, pero «no en dos o tres años».

Goirigolzarri ha hecho balance de su primer año al frente de Bankia en una entrevista concedida a El País, y ha explicado que cuando llegó, «por no tener, este banco no tenía ni cuentas auditadas». «Ahora, tras un gran esfuerzo tiene un plan de transformación aprobado por Europa, un proceso de capitalización que acaba la semana que viene, un balance potente y un cambio de gobierno corporativo muy fuerte», ha indicado.

En cuanto a los objetivos que se propone la entidad, ha reiterado que mantiene el objetivo de ganar este año 800 millones y 1.200 millones para 2015, a pesar de la complejidad del entorno. En este sentido, ha recalcado que Bankia «tiene un plan de ingresos y una fuerte de reducción de gastos».

En relación a las preferentes, el presidente de Bankia ha reconocido que «muchos clientes están decepcionados» y que el «plan de recuperación de Bankia sería más fácil, porque se habría evitado el daño comercial».

Respecto a la posibilidad de seguir los pasos de Novagalicia y pedir disculpas por este caso, Goirigolzarri ha recordado que se hizo «una campaña de publicidad admitiendo errores». «Lo que teníamos que decir ya lo hemos dicho», ha explicado, para añadir que «la admisión de errores por parte de una entidad financiera es suficientemente potente».

Asimismo, Goirigolzarri ha afirmado no recibir presiones del Gobierno para la concesión de créditos, remarcando que «la independencia es total». En este sentido, el presidente de Bankia ha indicado que existe «poca demanda» de hipotecas de particulares. No obstante, reconoce que Bankia «necesita dar créditos porque si no, no será rentable», si bien con «el objetivo claro de aumentar el crédito sin hacer tonterías, sin tener que meter más provisiones».