Bankia, entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, opta por vender los préstamos sin garantía de cobro de particulares al noruego Aktiv Kapital y los de pymes al luxemburgués Oko Investments. De este modo, la entidad ha comenzado deshacerse de los créditos que en su día concedió y hoy hay pocas posibilidades de cobrar.
El Grupo BFA-Bankia ha conseguido vender por 800 millones de euros su cartera de préstamos fallidos a dos fondos especializados en la gestión de cobros, el noruego Aktiv Kapital y el luxemburgúes Oko Investments.
La venta, que la entidad denomina Operación Hispania y dice que se enmarca en su «plan de desinversión de activos no estratégicos», permite a Bankia sacar de su balance préstamos sin garantía real de cobro. BFA-Bankia coloca a Aktiv la cartera de créditos de consumo a particulares y a OKO la de préstamos a pymes tras un proceso de subasta que arrancó en marzo.
La cartera está integrada por cerca de 127.000 créditos, con una antigüedad media de cinco años, y en torno a un 80% de los préstamos corresponden a clientes particulares. Dado que estos préstamos ya habían sido provisionados por Bankia, la desinversión tendrá un impacto positivo directo en la cuenta de resultados del banco.
El banco se ha fijado como objetivo reducir sus activos «improductivos» a la mitad en un plazo de tres años, hasta situarlos en 30.000 millones de euros, como anunció el nuevo presidente del grupo, José Ignacio Goirigolzarri, durante la última Junta General de Accionistas.