Txomin García, el presidente de Laboral Kutxa, ha afirmado que la entidad llevará a cabo una estrategia de “añadir los nuevos canales digitales, sin restar”.
García ha destacado que “no quiere sustituir su modelo de distribución a través de las oficinas, «que nos aporta y nos distingue».
Asimismo, ha insistido en el futuro rol de la cooperativa como entidad diferente también en la era digital: «debemos aprovechar la digitalización y desarrollar la omnicanalidad, sin duda, pero cimentada en nuestros diferenciales».
La Asamblea General Ordinaria de Laboral Kutxa, reunida en Bilbao, ha aprobado las cuentas anuales del ejercicio 2015, ya hechas públicas anteriormente, junto al resto de los puntos propuestos en el orden del día.
García explicó que la entidad logró el año pasado un beneficio neto consolidado de 110,3 millones de euros (un 0,9% más), unos resultados recibidos con «satisfacción» por el presidente de Laboral Kutxa.
El presidente de la entidad ha indicado que de cara al futuro, Laboral Kutxa ha redactado un nuevo Plan Estratégico (2016-2019) en un entorno financiero sujeto a múltiples incertidumbres, con una gran exigencia regulatoria y tipos extremadamente bajos.
La cooperativa de crédito se plantea para los próximos cuatro años tres retos: eficiencia, especialización y omnicanalidad.
García se ha mostrado confiado en el futuro, aunque también ha advertido de los riesgos que implica la nueva situación, señalando que «es importante no dejarnos arrastrar por la ola dominante, y mostrar bien quiénes somos, por qué hacemos lo que hacemos, y, sobre todo, cuál es el papel que queremos y podemos desempeñar en el nuevo escenario».
A juicio de Txomin García, la clave competitiva de la entidad se fundamentará en «volcar nuestros valores, nuestra profesionalidad y nuestra especialización también en los nuevos canales online».
Semanas atrás, la cooperativa de crédito Laboral Kutxa informó que prevé el cierre de entre 25 y 30 oficinas en los próximos dos años como último fleco de la integración de Caja Laboral y de Ipar Kutxa, que supuso su nacimiento a finales de 2012. De estas clausuras, 19 corresponderán a sucursales en Euskadi y, el resto, a la red de expansión.