HSBC prevé cerrar 117 oficinas este año en Reino Unido, 62 más de las inicialmente previstas, lo que podría suponer la pérdida de unos 380 empleos.
Con estos cierres, HSBC da por terminado su programa de reestructuración de sucursales, y no prevé anunciar más en lo que queda de año.
A finales de 2017, HSBC tendrá un total de 625 sucursales en Reino Unido, en comparación a las 965 que tenía en 2016, y prácticamente la mitad de las 1.301 oficinas que mantenía en junio de 2011.
Francesca McDonagh, directora de banca minorista y gestión de patrimonios de HSBC en Reino Unido y Europa, ha indicado que «la forma en la que los clientes hacen banca con nosotros está cambiando».
Por otro lado, ha agregado que «más clientes que nunca están utilizando servicios de banca a través del móvil e Internet» y ha destacado que, actualmente, más del 90% de las interacciones con clientes se llevan a cabo a través de canales digitales.
HSBC ha señalado que el cierre de estas oficinas va a garantizar una red de sucursales más sostenible de cara al futuro. En este sentido, McDonagh ha comentado que «tendremos menos sucursales, pero mejores».
Después de conocerse la decisión de HSBC, el sindicato Unite ha indicado que el cierre de estas 117 oficinas en Reino Unido va a traer como consecuencia la pérdida de 176 empleos, mientras que otros 204 puestos de trabajo en el área de tecnologías de la información podrían ser trasladados a India, China y Polonia.