Banco Santander ha anunciado este pasado jueves el lanzamiento de un plan de inversiones en Chile por 800 millones de dólares (unos 733 millones de euros), de aquí a 2026, y que se centrará en la transformación que esta llevando a cabo la entidad para pasar a ser un banco digital con sucursales Work/Café, y también en la construcción del Campus Santander.
En detalle, al nuevo edificio corporativo se destinarán 350 millones de dólares (unos 320 millones de euros) a través de Santander Investment. Por su parte, Santander Chile destinará 450 millones de dólares (unos 412,5 millones de euros) a iniciativas T&O y renovación de sucursales, entre otras acciones.
Román Blanco, el consejero delegado y director general de Banco Santander en Chile, ha afirmado que este es «un gran paso» que permite a la entidad seguir avanzando en su estrategia en el país andino.
Blanco ha señalado que «Este plan demuestra la confianza que tiene el Grupo y el compromiso de largo plazo que hemos adquirido para convertirnos en el mejor banco para Chile. Todas las acciones que vendrán, apoyadas en este plan de inversiones, buscan fortalecer al Banco y el desarrollo del país».
El consejero delegado y director general de Banco Santander en Chile ha recalcado que «Todas las acciones que hemos llevado a cabo son ampliamente reconocidas y nos han permitido convertirnos, por cuarto año consecutivo, en el banco con mayor satisfacción de sus clientes en el mercado financiero».
Respecto al tema de la presencia física, Banco Santander tomó la decisión de dar un paso más en la definición de sucursal bancaria creando Work/Café Expresso, centros transaccionales con cajeros o servicios de autoservicio, mostradores de atención, máquinas impresoras de tarjetas y taquillas para la entrega de productos.
Banco Santander quiere dar respuesta así al reto de la experiencia del servicio en sucursales. Estas oficinas tienen un NPS del 83%, lo que supone una alta calificación otorgada por parte de los clientes al servicio ofrecido, con tiempos no mayores a 10 minutos entre espera y atención.
Estas sucursales disponen de un horario ampliado, y han reforzado ciertas medidas para que los clientes puedan realizar sus transacciones de forma más segura. Desde marzo pasado, Banco Santander ya ha instalado cinco oficinas de este tipo.