Goldman Sachs ha firmado un acuerdo con el AS Roma por el que le otorga un crédito de hasta 30 millones de euros, para pagar los costes del desarrollo inicial de la construcción de un nuevo estadio, que necesitará una inversión aproximada total de 450 millones de euros.
El club italiano, mediante su filial Stadio TDV SpA, tendrá que pagar el dinero en un plazo de 22 meses, aunque puede amortizarlo por adelantado.
Goldman Sachs ha concedido el préstamo al asegurarse que el AS Roma prestará por lo menos 30 millones de euros más a su filial, de manera que se conseguirían los 50 millones previstos para trabajos previos.
Este dinero no podrá ser usado para ir pagando el crédito firmado, a menos que no pueda cumplir los vencimientos con sus propios recursos. El interés pactado es del 6% anual y la filial encargada de la construcción del estadio deberá pagar este segundo crédito en 28 meses.
El contrato de financiación también se asegura que la matriz del grupo, controlado en un 79% por un grupo de inversores liderado por el estadounidense James Joseph Pallotta, se encargará de pagar en caso de que la filial del estadio o la del club de fútbol no honren sus pagos, con unas garantías por valor de 32 millones de euros.
La firma de este acuerdo se ha formalizado un año después de que Goldman Sachs también refinanciara la deuda del AS Roma con un préstamo por 175 millones de euros, con vencimiento en el 2020. En la operación también ha participado como asegurador del préstamo la rama milanesa de UniCredit Bank, que hasta agosto de 2014 controlaba el 31% del equipo.
Hasta el momento, no se sabe si van a obtener la financiación para la mayor parte de las obras, gracias a la cual podrán mudarse del Estadio Olímpico, que pertenece a entidades públicas, para afincarse en un nuevo estadio que contará con una capacidad para 52.500 personas y que se prevé finalizar en el 2017.
La inversión total es de aproximadamente 450 millones de euros, e incluye en el nuevo estadio un centro de formación, zona de ocio y parque de negocios.