El andorrano Vall Banc ha comenzado un plan de mejora que implica una inversión superior a los 15 millones de euros a desarrollar en 2018.
Entre los diversos proyectos que abarca el plan, destaca la modernización de su sede central, ubicada en la avenida Carlemany de la capital andorrana, para convertirla en un espacio multidisciplinar de atención al cliente.
En este centro se integrarán los puntos de información y comunicación actuales que se convertirán en puntos de atención de fácil acceso para los usuarios, ha informado en un comunicado este jueves.
Vall Banc también ha iniciado la transformación del futuro espacio de atención al cliente situado en la calle Unió, así como las salas de reunión ubicadas en la sexta planta, una reforma valorada en más de cuatro millones de euros y que también prevé la remodelación de la oficina de la avenida Carlemany.
Asimismo, el plan de transformación contempla el cierre de la oficina del Pas de la Casa en los próximos meses, dado que Vall Banc quiere centrar sus esfuerzos en la atención a la banca privada y a la gestión de patrimonio (‘wealth management’) de las parroquias centrales y La Massana, pero se mantendrá el cajero del Pas de la Casa al que se sumará un nuevo cajero en Sant Julià de Lòria.
Asimismo, la entidad pretende llevar a cabo una inversión superior a los 12 millones de euros para la mejora de sistemas y la digitalización del banco.