El Banco Central Europeo (BCE) ha anunciado que durante los últimos días no ha comprado deuda de la zona euro. Esto significa que son ya 23 las semanas que acumula la entidad sin adquirir endeudamiento de la Eurozona.
Según las estimaciones, este endeudamiento alcanza por segunda semana consecutiva la cantidad de 211.500 millones de euros, al no haberse producido vencimientos la semana pasada.
En la actualidad, el BCE trabaja en la creación de un nuevo plan destinado a la compra de deuda soberana en relación a los fondos de rescate europeos y la imposición de nuevas medidas en los ámbitos político y económico para los países de la UE.
Pero, a pesar de la inactividad de la institución con respecto a la deuda de la Eurozona hasta el momento y de las críticas recibidas por parte de Jens Weidmann, presidente del Bundesbank, Jörg Asmussen, miembro alemán en el comité ejecutivo del BCE defendió en una entrevista con el diario alemán Frankfurter Rundschau la adquisición de deuda de los países de la zona euro; eso sí, siempre bajo condiciones que garanticen el éxito de la medida.
En palabras del ejecutivo: «El BCE sólo actuará paralelamente con el FEEF y después el MEDE. Un Estado debe presentar una solicitud de ayuda y cumplir numerosas condiciones político-económicas».
Las expectativas de los países y parqués europeos, así como de la propia opinión pública internacional son altas, pero los mercados tendrán que ser pacientes y mantenerse a la espera, ya que no será hasta el 6 de septiembre cuando el Consejo de Gobierno del BCE se reúna y haga públicas las ansiadas medidas que haya aprobado.