La Comisión Europea ha aceptado hoy dar una prórroga al banco holandés ING para devolver las ayudas públicas recibidas durante la crisis y para vender su negocio de seguros debido a la situación difícil en los mercados.
ING tendrá hasta 2015 para devolver al Estado holandés los 3.000 millones de euros de ayudas pendientes, más una prima del 50%, según el plan de reestructuración modificado que ha aprobado Bruselas.
Además, el plazo para desprenderse por completo de su negocio de seguros en Europa se prorroga hasta 2018, en lugar de 2013 como estaba inicialmente previsto. El banco holandés también dispondrá de más tiempo para vender sus seguros en Estados Unidos.
A cambio de esta mayor flexibilidad, el Ejecutivo comunitario prolonga la prohibición a ING de adquirir activos y de ejercer una influencia determinante sobre los precios, en particular en ING Direct Europa.
Asimismo, el banco holandés deberá facilitar la aparición de una nueva entidad minorista en Holanda en 2015, NN Bank. Éste nacerá de la fusión del negocio de crédito hipotecario de ING, WestlandUtrecht Bank, con la división de seguros en Holanda, Nationale-Nederlanden.
«Nuestro acuerdo con las autoridades holandesas preserva el equilibrio del plan inicial. El plan modificado corrige de forma apropiada los problemas generados por todas las ayudas de Estado recibidas por ING», ha dicho el comisario de Competencia, Joaquín Almunia, en un comunicado.